Los códigos ¿ Dónde se dirigen ?
Esta semana entra en debate algo que los que nos dedicamos a esto hemos tenido a gala: Los códigos no escritos en el mundo del futbol.
Frases como:
"Lo que pasa en el campo se queda en el campo"
"El vestuario es sagrado"
"Somos compañeros de profesión y queda entre nosotros"
...
Son frases que siempre han hecho más grande esta profesión, este deporte y que, poco a poco, como muchos valores en esta sociedad, empiezan a diluirse. Tendemos cada vez más a que un deporte colectivo, sea cada vez más individual, que el rival sea enemigo y que yo cuento algo antes por si acaso soy el culpable.
Si estos códigos siguieran presentes, lo de este fin de semana en el Ciudad de Valencia, se habría quedado en los 6 metros cuadrados que dicen que tiene la enfermería, pero ya se sabe, como decíamos antes, si tú hablas yo más.
Y poco a poco, este deporte empieza a incluir en ese código no escrito más leyes personales que colectivas, como se supone que es la interacción entre jugadores del mismo equipo y del rival, que no enemigo.
Las luchas intestinas, por metas, por retos, por trofeos INDIVIDUALES, hacen que cada vez el futbol forma mas parte de la voraz actividad empresarial que deportiva. Todo forma parte de una reivindicación individual y no de conjunto.
Y si a eso añadimos la necesidad de noticias ¿deportivas?, pues: APAGA Y VAMONOS.
Menos mal que todavía nos quedan detalles como el de Michel con Bielsa.
Frases como:
"Lo que pasa en el campo se queda en el campo"
"El vestuario es sagrado"
"Somos compañeros de profesión y queda entre nosotros"
...
Son frases que siempre han hecho más grande esta profesión, este deporte y que, poco a poco, como muchos valores en esta sociedad, empiezan a diluirse. Tendemos cada vez más a que un deporte colectivo, sea cada vez más individual, que el rival sea enemigo y que yo cuento algo antes por si acaso soy el culpable.
Si estos códigos siguieran presentes, lo de este fin de semana en el Ciudad de Valencia, se habría quedado en los 6 metros cuadrados que dicen que tiene la enfermería, pero ya se sabe, como decíamos antes, si tú hablas yo más.
Y poco a poco, este deporte empieza a incluir en ese código no escrito más leyes personales que colectivas, como se supone que es la interacción entre jugadores del mismo equipo y del rival, que no enemigo.
Las luchas intestinas, por metas, por retos, por trofeos INDIVIDUALES, hacen que cada vez el futbol forma mas parte de la voraz actividad empresarial que deportiva. Todo forma parte de una reivindicación individual y no de conjunto.
Y si a eso añadimos la necesidad de noticias ¿deportivas?, pues: APAGA Y VAMONOS.
Menos mal que todavía nos quedan detalles como el de Michel con Bielsa.